En 1600 a.C., los aqueos (fusión de tribus llegadas de Asia menor y de indo Europa, en el tercer milenio a.C.), de Tesalia (norte continental), invadieron a los minoicos, originarios de Oriente medio. La mezcla de esas dos culturas, una pacífica, de adoración a lo femenino (la fertilidad), y otra, guerrera cuya divinidad principal era Diao –dios indio del cielo, antecesor de Zeus– configuró la civilización micénica.

Micenas dominó Atenas, Tebas, Pilos y Tirinto, entre otras ciudades. Según la épica griega, Agamenón, Rey de Micenas, conquistó la ciudad de Troya (actual Hisarlik, en Asia menor, donde se creó el alfabeto griego) en el siglo XII a.C., tras una larga guerra que habría arrastrado a los micenos a su fin.

El declive de Micenas comenzó ese siglo con la invasión de los dorios. También indo-europeos, éstos destruyeron cuanto encontraron en Creta y sus dependencias (Tesalia, el Peloponeso y las Islas Cícladas) y subyugaron ala población con armas de hierro desconocidas en Grecia.

Los tres siglos posteriores a la invasión doria fueron catalogados como la era oscura de Grecia, por la militarización a que fue sometida la sociedad. Producto de esta época de terror fue la creación de ciudades-Estado autónomas y amuralladas, en Atenas, Esparta, Tebas, Corintia y Argos.

Dorios y micenos gestaron una religión y una lengua comunes. Los poemas épicos de Homero, escritos durante el siglo IX a.C., incorporaron divinidades de distintas localidades a un relato coherente (unificado por Zeus),cuyo escenario fue la cima del monte Olimpo.

En los episodios que protagonizaban dioses y héroes (mortales dotados de poderes divinos) del pasado, se explicaban las leyes cósmicas que regían la vida en la Tierra. Los griegos reconocían, asimismo, poderes oscuros, ocultos en un mundo subterráneo, que se activaban en casos de culpabilidad.

El culto a cada dios (cuyos rituales incluían el sacrificio humano), dueño de una fuerza de la naturaleza o de un mandato social, tenía lugar, tanto en privado como en festivales multitudinarios, donde se teatralizaban pasajes de la Ilíada, la Odisea y otros poemas homéricos. Los torneos deportivos organizados en Olimpia en 776 a.C. para homenajear Zeus y a la diosa Hera fueron el primer acontecimiento registrado de la historia de Grecia y la inauguración del período arcaico.

En el correr del siglo 700 a.C y de los dos siguientes, una explosión demográfica empujó a los griegos a navegar, en busca de tierras, desde el norte de África (incluyendo España, Francia e Italia), hasta Asia menor.

El arte griego, influenciado por Asia menor y Egipto, recobró el empleo de las curvas, que las formas geométricas rectilíneas impuestas por los dorios habían borrado desde la época micénica. Atenas, con su estilo ático, desplazó a los fenicios (ver historia de Líbano) del mercado de cerámica y pintura.

Hacia fines del siglo VII a.C., el comercio fue revolucionado por la utilización de moneda que aprendieron los griegos de los lidios. Esto aceleró el ascenso al poder político de una clase comerciante que se apoyó en el campesinado para desplazar a la nobleza. Se democratizó el sistema de gobierno en las ciudades excepto en Esparta, que se mantuvo oligárquica.

En el curso de siglo VI a.C., filósofos de Troya comenzaron a desarrollar una crítica racional de las creencias y las prácticas religiosas. Esta línea de pensamiento escéptico fue continuada por los sofistas y por dramaturgos como Eurípides y Aristófanes. La poesía lírica de Lesbos, de los siglos VII a.C. y VI a. C., conmocionó a los griegos; algunos trabajos matemáticos de Pitágoras del siglo VI a.C. jamás fueron superados.

El comienzo del período clásico (499 a.C-323 a.C.) estuvo marcado por la devastación de dos invasiones persas, y por la victoria y el encumbramiento de la cultura ateniense. El triunfo de las ciudades confederadas (en las Guerras Médicas, 499 a.C.- 479 a.C.), sobre un invasor más poderoso (el Imperio Persa) otorgó a los atenienses –cuya intervención militar había sido determinante– bríos de gloria para emprender la reconstrucción de su ciudad y la expansión de un imperio propio.

Tras apropiarse del tesoro del santuario de Delos, en 454 a.C., símbolo de la unión e las ciudades-Estado griegas contra el enemigo persa, Atenas impuso el pago de tributos a todas las ciudades confederadas (de la Liga de Delos - 476 a.C.).

Pericles, gobernante de Atenas entre 443 a.C. y 429a.C., perfeccionó el sistema de gobierno –instituido en 594 a.C.–, que más tarde sería catalogado como de democracia esclavista, debido a las restricciones del estatus de ciudadano (que excluía a esclavos y mujeres). Las primeras definiciones de ciudadanía y de pluralismo político con derechos y obligaciones articulados por escrito fueron redactadas por el estadista Solón(640 a.C.-558 a.C.).

Las obras e ideas de los maestros eran expuestas y debatidas en espacios abiertos. Sócrates (470-399 a.C.) ideó el pensamiento dialéctico y lo aplicó a la introspección; Platón (427-348 a.C.),profundizó en los postulados éticos y metodológicos del primero y creó una escuela espiritualista; Herodoto (484-420 a.C.) utilizó, por primera vez, un método objetivo (examen de evidencias) de investigación histórica.

Los pintores y escultores griegos estudiaron el cuerpo humano, motivo central de sus obras. La escultura era el arte más difundido y la práctica de deportes constituía un signo de grandeza espiritual. El hombre, considerado «el parámetro de todas las cosas», era escrutado en todas sus dimensiones.

La ciudad de Esparta, un Estado enteramente militarizado, fundado en el siglo IX a.C., disputó a Atenas la hegemonía sobre Grecia en reiterados combates entre 431-404 a.C. (Guerra del Peloponeso), que determinaron la caída del Imperio Ateniense (404 a.C.).

A la primacía de Esparta (404-371 a.C.), siguió la de Tebas (372-362 a.C.). Las luchas permanentes debilitaron a los griegos y facilitaron el avance de Filipo II de Macedonia, quien terminó de ocupar el territorio en 338 a.C., con la intención de incorporar, en una segunda etapa, el Imperio Persa.

El Rey Filipo II tenía, por principal consejero, a Demóstenes(384-322 a.C), un maestro ateniense de la retórica. Asimismo, eligió a Aristóteles(384-322 a. C.), fundador de la lógica formal y autor de tratados de política, metafísica y física, como preceptor de su hijo Alejandro.

Tras la muerte de Filipo II, en 340 a.C., Alejandro prosiguió el proyecto de su padre. Amplió la zona de influencia de la cultura griega al conquistar territorios el este del Mediterráneo, de la Península Arábiga, de Mesopotamia y de India. El intercambio de conocimientos y costumbres entre ambas culturas fue denominado «helenismo».

Los centros políticos y culturales del mundo helénico fueron Alejandría (Egipto) y Babilonia (Mesopotamia). Al morir Alejandro Magno en 323 a.C., el imperio se dividió y Grecia quedó en manos de los reyes de Macedonia.

Roma estableció su dominio formal sobre Grecia en 146 a.C., tras vencer al ejército macedónico y a la liga aquea (de ciudades griegas confederadas), luego de 50 años de combates. Aunque sometieron a Grecia en lo político y lo económico, los romanos (itálicos, de origen indo europeo, llegados en el II milenio a.C.) a fin de consolidar y extender su imperio, debieron asimilar la cultura griega. Por ese motivo, Atenas adquirió beneficios especiales y fue sede de la principal universidad del Imperio Romano.

En el paganismo greco romano, el campo de la ética pertenecía a los filósofos. Doctrinas opuestas como la estoica (austera) o la epicúrea (sensual) orientaban la vida (concebida sin «más allá») de los ciudadanos cultos. Tras la oficialización del cristianismo (siglos III y IV) algunas de estas doctrinas, originadas en Grecia, operaron, hasta el siglo VI, como contra-culturas, al tiempo que otras, como el neoplatonismo, contribuyeron a la afirmación del que sería el nuevo paradigma de Occidente.

Las prédicas cristianas tuvieron buena acogida entre los esclavos griegos. Mayoritariamente agricultores, éstos esperaban que alguna autoridad matizara la diferencia entre la abundancia de los centros urbanos y el abandono del medio rural. A partir del siglo IV, los monasterios cumplirían, aunque parcialmente, esta función.

Constantino I (280-337), coronado Emperador de Derecho Divino en 313, trasladó la capital del Imperio Romano a Bizancio (actual Istambul), colonizada por los griegos en el siglo VII a.C. Allí fundó Constantinopla entre 324 y 330, para evitar la irrupción de los persas y controlar la frontera del Danubio, por donde afluían invasores bárbaros.

Entre los siglos III y XI, Grecia fue escenario de incursiones devastadoras por parte de tribus germanas (godos, hérulos y vándalos),asiáticas (hunos y ávaros), escandinavas (normandas), así como de búlgaros y árabes.

Las escuelas de Atenas declinaron, durante el siglo IV, al tiempo que el paganismo abandonó la mitología. En 394, se dispuso la interdicción de los Juegos Olímpicos. Asimismo, en el siglo VI el Emperador Justiniano prohibió a los filósofos paganos el ejercicio de la docencia y limitó a la élite de Constantinopla el acceso a los textos de los grandes pensadores griegos.

Aunque algunos comerciantes griegos se enriquecieron bajo el dominio de Bizancio, la economía de Grecia se deprimió. Bizancio fue capital del Imperio Romano de oriente (394-1054), del Imperio Greco-Oriental, tras el cisma de la Iglesia de 1054, en que Grecia reconoció obediencia a la Iglesia cristiana ortodoxa, y del Imperio Latino de oriente, bajo la ocupación depredadora de la cuarta cruzada entre 1204 y 1261.

Los venecianos desalojaron a los cruzados y controlaron amplias zonas, terrestres y marítimas, del antiguo Imperio Latino, aún después de la toma de Constantinopla por el Imperio Turco-Otomano en 1454. Sólo en 1718, por la firma de la Paz de Passarowitz, Venecia prometió retirarse de Grecia (lo que hizo en 1797).

Durante el período bizantino tardío (1204-1453), además de venecianos y turcos otomanos, serbios, catalanes, sicilianos, franceses y compañías mercenarias ocuparon territorios de Grecia. La debilidad política de Bizancio produjo un resurgimiento del helenismo en Grecia, que volvió a erigirse en centro cultural.

En el correr de los primeros tres siglos de ocupación turco-otomana, Grecia no opuso mayor resistencia. Los primeros sultanes permitieron a los griegos comerciar y practicar su lengua y su religión.

Durante el levantamiento religioso de 1770 una victoria parcial sobre los turcos alentó, junto con las noticias de las revoluciones estadounidense (1776) y francesa (1789), a saciar un apetito de libertad que los griegos no lograban definir con un criterio unificado. Su falta de unidad nacional y su vulnerabilidad frente a las fuerzas turco-egipcias habilitó la intervención de Rusia, Inglaterra y Francia, en la revolución independentista de 1821-32.

La revolución anti turca tuvo una primera fase de levantamientos locales (desde 1821, hasta 1825), a la que siguieron, a partirde1826, enfrentamientos armados entre turco-egipcios y las tres potencias europeas que firmaron, en 1827, el Tratado de Londres, por el que declaraban la independencia de una Grecia bajo su protección.

Durante la Conferencia de Londres de 1832, Otto de Bavaria, de 17 años, fue elegido Rey. La permisividad de Otto frente a los desbordes de una camarilla bávara en Grecia provocó múltiples insurrecciones entre 1833 y 1843, año en que fuerzas rebeldes independentistas rodearon el palacio real exigiendo la renuncia de Otto y el establecimiento de una Constitución, promulgada en 1844.

En 1863, desacreditado, tanto por las rivalidades entre las potencias de ocupación, como por las amenazas de Turquía, Otto fue reemplazado por Guillermo de Dinamarca, por la firma, en Londres, de un protocolo similar al de 1832, que estipulaba, además, el retiro de Inglaterra de las Islas de Troya.

Jorge I (Guillermo), quien reinó en Grecia entre 1863 y1913, estableció un gobierno electivo y definió la posición del rey como instrumento pasivo de la voluntad del pueblo en un sistema definido como «democracia monárquica». Tras ganar popularidad durante la lucha anti turca en Creta y obtener su reanexión a Grecia en 1908, Eleuterio Venizelos alteró la Constitución para acceder al cargo de primer ministro en 1910, con 80% de los votos.

Tras conseguir la aprobación de una nueva Constitución en 1911,Venizelos creó la Liga de los Balcanes y declaró la guerra a Turquía, junto a Bulgaria y Serbia, en noviembre de 1912, a fin de recuperar el territorio de Salónica, perdido luego del Tratado de Londres de 1827.Una segunda Guerra de los Balcanes estalló un mes más tarde, cuando los búlgaros atacaron a sus dos aliados, a quienes se sumó Rumania. Ambas guerras, finalizadas en agosto de 1913, permitieron a Grecia ampliar su territorio.

La primera Guerra Mundial (1914-18) desencadenó un enfrentamiento entre el Rey Constantino y Venizelos, que dividió a la población. El rey se declaró neutral, pero Venizelos denunció su connivencia con Alemania, por lo que fue expulsado del gobierno en1915. En 1916, tras instalar un gobierno republicano paralelo en Salónica, Venizelos colaboró con la tropas aliadas.

El período entre guerras fue sacudido por un conflicto bélico con Turquía (1922-23) –con un saldo de más de un millón de damnificados– y otro fronterizo, con Albania, que provocó un bombardeo de Italia (1923). Ambos motivaron la intervención de la Liga de las Naciones. Venizelos fue desplazado de la escena política en 1935.

Grecia permaneció ocupada por las tropas nazis entre 1941 y1944. En 1949 EE.UU. intervino, de manera directa, para eliminar una guerrilla comunista y, en lo sucesivo, controló la economía de Grecia, donde reclutó contingentes para la Guerra de Corea (1950-53). Asimismo, auspició su ingreso al Consejo de Europa (1949) y a la OTAN (1951).

En 1952, se aprobó una nueva Constitución. Las mujeres griegas sufragaron, por primera vez, en las elecciones presidenciales de 1956, cuando resultó ganador el candidato Konstantinos Karamanlís, de la Unión Radical Social, quien debió renunciar en 1963, tras denuncias de fraude.

Al perfilarse una posible victoria electoral de la izquierda, un grupo de coroneles dio un golpe de Estado en abril de 1967. Se instauró la Ley Marcial y se suspendió la Constitución. Los movimientos democráticos fueron reprimidos y el líder socialista Andreas Papandreu fue encarcelado.

El régimen de «los coroneles» continuó recibiendo ayuda de EE.UU. y de grandes empresarios griegos como Onassis. A pesar de un intento de enmascarar la dictadura mediante la creación, en 1968, de un Parlamento unicameral, la junta militar gobernaba por decreto.

Entre 1973 y 1974 el gobierno militar sufrió un desgaste muy acelerado. En julio de 1974, la junta militar griega promovió un golpe de Estado en Chipre, en colaboración con la Guardia Nacional de ese país. El golpe depuso al arzobispo presidente Vaneziz Makarios y nombró un primer ministro partidario de la anexión a Grecia. El ejército turco invadió Chipre con el pretexto de defender a la minoría turca de ese país. El desprestigio de los militares griegos creció y ante la condena internacional y la perspectiva de una guerra con Turquía, abandonaron el poder inmediatamente.

Karamanlís regresó de su exilio y asumió el gobierno. En las elecciones de 1974 su partido ganó la mayoría parlamentaria; en un posterior referéndum se consagró la abolición de la monarquía. En 1975, el parlamento adoptó una nueva Constitución y Constantino Tsatsos, fiel a Karamanlís, fue elegido primer presidente de la República.

En las elecciones parlamentarias de 1981, el PASOK (Movimiento Socialista Panhelénico), encabezado por Papandreu, obtuvo una amplia victoria. Ese año, Grecia ingresó a la CEE. El gobierno de Papandreu reconoció a la OLP y lideró una campaña mundial por la restitución de los objetos de arte saqueados durante la dominación colonial.

El PASOK volvió a triunfar en las elecciones de 1984. En 1986, sucesivos planes de austeridad y de congelamiento de salarios, aplicados desde 1983, generaron protestas y huelgas. En junio de 1989 el Partido Griego de Izquierda y el Partido Comunista crearon la Coalición de Izquierda (CI).

En las elecciones de 1989, el PASOK perdió la mayoría y el conservador Nueva Democracia (ND) fue el partido más votado. Sin mayoría parlamentaria y sin acuerdo para constituir gobierno, la presidencia quedó en manos del líder de la CI, quien formó un gobierno transitorio con la ND, con la intención de investigar los escándalos financieros. En noviembre se conformó un gobierno de coalición.

Entre 1983 y 1989, Grecia y EE.UU. firmaron varios acuerdos sobre el mantenimiento de cuatro bases militares estadounidenses en el país, a cambio de asistencia económica y militar, así como de apoyo diplomático de EE.UU. en las disputas territoriales de Grecia con Turquía. Sin embargo, en1990, Washington y Atenas divulgaron su disposición a clausurar dos de las bases.

En marzo de 1990 se aprobó una ley que estableció la negociación libre entre trabajadores y empresarios e incluyó normas para la organización de los comités de empresa y los sindicatos, lo que puso fin a 50años de intervención del Estado.

Tras el triunfo de Karamanlís en las elecciones presidenciales de 1990 se formó un nuevo gobierno encabezado por el conservador Constantinos Mitsotakis, quien impulsó una política de reducción del gasto público, liberación de precios y privatizaciones. El costo social de estas medidas fue una de las causas de la derrota del gobierno conservador en las elecciones legislativas de 1993, en favor de Papandreu.

El endeudamiento público y las presiones de la Unión Europea (UE) en materia de economía complicaron la gestión de Papandreu.

En 1995, al expirar el segundo mandato de Karamanlís, Papandreu apoyó al candidato del pequeño partido Primavera Política, Kostis Stefanópulos, quien gozaba de prestigio político. Éste resultó electo en 1995 y reelecto en 2000, cuando ganó por un estrecho margen sobre los conservadores liderados por Karamanlís.

Enfermo y desprestigiado, Papandreu renunció en enero de 1996 y murió cinco meses más tarde. Lo sustituyó su ex Ministro de Industria, Konstantinos Simikis. En setiembre, el Partido Socialista, dirigido por el nuevo primer ministro, ganó las elecciones legislativas.

Para respaldar su voluntad de integración regional, en enero de1998, Atenas abolió un artículo constitucional de la época de «los coroneles», que permitía quitarle la nacionalidad a los ciudadanos «no étnicamente griegos» que abandonaran Grecia. En virtud de este artículo, utilizado contra la minoría musulmana de origen turco, unas 60 mil personas perdieron la nacionalidad griega.

En 2000, al ser designado primer ministro por segunda vez, Simikis aclaró que continuaría adoptando medidas para bajar el gasto público que alcanzaba, aún, el 50% de PBI de Grecia

En 2002, Atenas y Ankara firmaron un acuerdo para la construcción de un gasoducto por el cual Turquía suministraría gas natural a Grecia.

En marzo de 2004, Kostas Karamanlis (sobrino del ex presidente) asumió como primer ministro tras la victoria de su partido, ND, en las elecciones parlamentarias de ese mes.

El Parlamento griego ratificó la Constitución de la UE en abril de 2005.

En mayo de 2006 dos altos funcionarios de inteligencia fueron acusados formalmente del secuestro e interrogatorio de dos paquistaníes sospechosos de haber participado en los atentados contra el metro de Londres, de julio de ese año.

El primer ministro Karamanlis pudo evitar un voto de no confianza en el parlamento, en febrero de 2007. Los conservadores lograron 162 votos de confianza contra 122 en contra de la gestión del gobierno, al que los socialistas acusaban de incompetencia. Tras la votación, Karamanlis anunció que continuaría las reformas en educación y salud y que nada se interpondría en el camino.