Entre los siglos IX y XII d.C. la mayor parte de la Ucrania contemporánea pertenecía a la Rus de Kiev (Kijef), que unía varias alianzas de pueblos eslavos del este. La principal era la alianza de rosos o rusos, con la capital en Kiev. El antiguo pueblo ruso dio origen a las tres principales naciones eslavas del este: la rusa, la ucraniana y la belarusa. En el siglo XII la Rus de Kiev se desintegró, separándose en el territorio actual de Ucrania los principados de Kiev, Chernigov, Galich y Vladimir-Volinski. En el siglo XIII se produjo la invasión tártara. En el siglo XIV el Gran Principado de Lituania se anexó los territorios de Chernigov y Novgorod-Severski, Podolia, Kiev y una gran parte de Volín. En la parte sur de Ucrania y en Crimea surgió el Khanato (reino) de Crimea, que empezó a invadir Galitzia y Podolia. Las tierras transcárpatas fueron tomadas por Hungría desde el siglo XI.

En el siglo XV se formó el pueblo ucraniano (de la palabra krai, frontera). Así se llamaba en 1187 la amplia franja fronteriza a lo largo de las estepas pobladas por los polovtsi (kipchakos). En 1213, krai era el nombre de los territorios limítrofes con Polonia. En el siglo XVI se usó el nombre atribuido a toda la región de Ucrania. Históricamente existieron estrechos lazos entre ucranianos y rusos, como la lucha contra los reinos feudales polacos y lituanos y contra los tártaros de Crimea. En el siglo XVI los territorios ucranianos –Volín, Podolia del este, Kiev y parte de la orilla izquierda del Dniéper (Dnepr)– fueron incorporados a la Rzecz Pospolita (unión de Polonia y Lituania), que les impuso el catolicismo romano.

En la primera mitad del siglo XVII se intensificó la lucha emancipadora contra Polonia y Lituania. La guerra del pueblo ucraniano (1648-1654) bajo la dirección de Bogdán Jmelnitski finalizó con la unificación de Ucrania y Rusia. En marzo de 1654 se ratificó la autonomía ucraniana dentro del Imperio Ruso.

En la segunda mitad del siglo XVIII, Ucrania del Sur se convirtió en uno de los principales proveedores de trigo del imperio. En 1783, el khanato de Crimea fue anexado por Rusia. Después de los repartos de Polonia entre Rusia, Prusia y Austria (1793-1795), se unió a Rusia el territorio de la orilla derecha del Dniéper. A fines del siglo XVIII quedó abolida la autonomía de Ucrania. En 1796, la Ucrania situada en la orilla izquierda del Dniéper se convirtió en la Provincia de Malo Rossiya (Rusia chica).

Tras la caída del zarismo ruso en febrero de 1917, se estableció en Ucrania una dualidad de poderes, entre el Gobierno Provisional de San Petersburgo y la Rada (asamblea) Central de Ucrania (Kiev), creada con apoyo de la burguesía y de círculos nacionalistas. En diciembre, después del triunfo de la revolución bolchevique, el primer congreso de los soviets de Ucrania proclamó el poder soviético. La Rada apoyó a las tropas austro-alemanas que invadieron el país en la primavera de 1918. Hasta 1920, Ucrania fue campo de batalla de la guerra entre el poder soviético y sus enemigos internos y externos. En diciembre de 1922, Ucrania participó del Primer Congreso de los Soviets de toda Rusia, en Moscú, donde se aprobó la fundación de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).

En el período de entreguerras, el gobierno soviético impulsó en Ucrania la industrialización y la colectivización de la agricultura.

Por las cláusulas secretas del tratado de no agresión firmado en 1939 entre Alemania y la URSS, la Ucrania Occidental, que pertenecía a Checoeslovaquia, Polonia y Rumania, fue incorporada a la URSS ese año. En 1940, Ucrania se vio ampliada con Besarabia y Bukovina del Norte. En 1941, los nazis invadieron Ucrania y se generó un fuerte movimiento guerrillero de resistencia. Terminada la Segunda Guerra Mundial, todas las tierras de la etnia ucraniana quedaron agrupadas dentro de la URSS. Ucrania participó en la fundación de la ONU como Estado separado.

En 1954, el poder central soviético, encabezado por Nikita Khruschev, ex primer secretario del Partido Comunista de Ucrania (KPU) y máximo dirigente del PC de la Unión Soviética (PCUS), entregó a Ucrania la región de Crimea, hasta entonces parte de la Federación Rusa.

El 26 de abril de 1986, en la central de Chernobyl, 130 kms. al norte de Kiev, se produjo el más grave accidente nuclear de la historia. La explosión de un reactor afectó un área con 600 mil habitantes, de los cuales hasta 1993 habían fallecido 7 mil a causa de las altas radiaciones recibidas y habían sido evacuados 135 mil. El reactor fue recubierto con una capa de cemento de varios metros de espesor, formando una estructura bautizada como el sarcófago. La nube radiactiva de Chernobyl no sólo afectó a Ucrania y Rusia: también la actual Belarús, Polonia y regiones de Suecia y Finlandia fueron contaminadas seriamente. En los años siguientes, investigadores extranjeros registraron en la zona un aumento de los casos de cáncer y otras enfermedades asociadas con la radiactividad.

En el marco de las reformas iniciadas en 1985 por el presidente Mijaíl Gorbachov en la URSS, comunistas y nacionalistas ucranianos fundaron el Movimiento Popular Ucraniano por la Perestroika (RUKH), que reivindicó una mayor autonomía económica y política. En los comicios legislativos de marzo de 1990, los candidatos del RUKH obtuvieron un amplio respaldo. El 16 de julio de 1990, el Soviet Supremo (Parlamento) de Ucrania proclamó la soberanía de la república. El 24 de agosto de 1991 aprobó el Acta de Independencia y convocó un plebiscito para ratificarla.

En diciembre de 1991, el 90% de los ucranianos ratificó la independencia. En el mismo acto fue electo presidente Leonid Kravchuk, ex primer secretario del KPU.

El 8 de diciembre de 1991, los presidentes de Ucrania, la Federación Rusa y Belarús declararon el fin de la URSS y fundaron la Comunidad de Estados Independientes (CEI).

En los primeros meses de 1992, el gobierno ucraniano decretó la liberación de precios; creó una nueva moneda, el karbovanets; licitó fábricas de material bélico y creó incentivos para las inversiones extranjeras.

El 5 de mayo, Crimea declaró su independencia, que fue objetada por el Parlamento ucraniano. Crimea cedió y anuló la declaración. Rusia reaccionó en junio, anulando el decreto de 1954 por el que cedió Crimea a Ucrania y reclamó su devolución. Kiev se opuso y concedió a Crimea la autonomía económica.

El Consejo Supremo decretó en junio de 1993 la apropiación de todo el arsenal nuclear de la ex URSS estacionado en Ucrania, que con la desintegración soviética se convirtió en la tercera potencia nuclear del mundo.

Debilitado políticamente, en setiembre de 1993 Kravchuk cedió a Rusia la parte de la flota del Mar Negro que correspondía a Ucrania. Era la compensación de la deuda contraída con Moscú por los suministros de petróleo y gas. Además, recibió ayuda para desmantelar los poderosos 46 misiles intercontinentales SS-24 que Ucrania quería conservar como garantía de seguridad frente a posibles proyectos expansionistas de Rusia. La oposición en Kiev denunció el acuerdo.

Las primeras elecciones presidenciales de la era pos soviética tuvieron lugar en junio y julio de 1994. Kuchma derrotó al presidente saliente con 52% de los votos y confirmó su intención de estrechar lazos con Rusia e ingresar plenamente en la unión económica de la CEI.

En las elecciones parlamentarias de marzo de 1998, el KPU obtuvo 113 bancas (24,7%), conformándose, de hecho, una mayoría parlamentaria de izquierda y centro izquierda. En la segunda vuelta de las presidenciales, en diciembre de 1999, Kuchma, independiente, fue reelecto.

Tras la desaparición de un periodista crítico al régimen, políticos opositores denunciaron la existencia de una grabación que registraría al presidente discutiendo con oficiales de seguridad –previo a la desaparición– la solución al problema del periodista en cuestión. En febrero de 2001 se sucedieron las manifestaciones populares en reclamo de la renuncia de Kuchma.

En abril de 2001 el parlamento destituyó al primer ministro Viktor Yushchenko, el mejor aliado para las reformas de mercado que exigía Occidente. La crisis política resultante evidenció la tensión entre al menos tres sectores: las fuerzas pro-rusas que intentaban devolver a Kiev a la órbita del Kremlin, las fuerzas pro-occidentales que querían mantener el camino de reformas y anclar definitivamente el país en la vía de la UE y la OTAN, y las organizaciones mafiosas cuyo objetivo primordial era mantener la inestabilidad, con la que lucraban.

En noviembre de 2004, la Comisión Central Electoral de Ucrania declaró a Víctor Yanukovych como ganador oficial de las polémicas elecciones presidenciales. Según la comisión, el candidato pro-ruso Yanukovych obtuvo el 49,6% de los votos. La mayoría de los observadores internacionales, incluidos los designados por la Organización para la Cooperación y la Seguridad Europea y por EE.UU., reconocieron irregularidades en el proceso electoral.

Poco antes de conocerse los resultados, Yanukovych dijo que no necesitaba una victoria falsa que pudiera causar heridos y violencia, y que esperaba que la legitimidad de los resultados fuera probada legalmente. El líder opositor, Yuschenko, por su parte, declaró que estaba preparado para presentarse a una segunda elección si se garantizaba «una comisión electoral honesta». El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, advirtió que habría consecuencias en las relaciones entre la UE y Ucrania si no se realizaba una revisión objetiva y equilibrada del proceso electoral y los resultados electorales. Kuchma descartó categóricamente el uso de la fuerza para dispersar las masivas protestas de los simpatizantes de Yushchenko. El dirigente opositor, por su parte, llamó a soldados y policías a «defender a su pueblo» y a «prohibir el empleo de las armas contra civiles»

El 3 de diciembre la Corte Suprema declaró inválidos los resultados de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. Tras cinco días de deliberación, los 21 miembros del máximo tribunal ucraniano recomendaron repetir la segunda ronda el domingo 26 de diciembre, con la participación de los mismos dos candidatos.

El 20 de enero de 2005, la Corte Suprema de Ucrania confirmó a Viktor Yushchenko como ganador de la segunda ronda del 26 de diciembre de 2004.

En septiembre, Yuschenko destituyó a la primer ministra Yulia Timoshenko, disolvió su gabinete y nombró a Yurii Yekhanurov como su sucesor. Timoshenko manifestó que, al destituirla, Yuschenko había destruido la alianza política entre ambos y también el futuro del país.

En enero de 2006, Rusia cortó el suministro de gas a Ucrania debido a que Kiev se negó a pagar el aumento de precio de 460% impuesto por Moscú.Según las autoridades ucranianas, la medida rusa se debía a una represalia por los intentos de Kiev de volverse más independiente de Moscú y desarrollar lazos más estrechos con Europa. Gazprom, compañía estatal rusa de gas, cobraba precios subsidiados a los ex países miembro de la URSS.

En marzo de 2006 se realizaron elecciones parlamentarias en las que triunfó el Partido de las Regiones, de Yanukovich, con 186 escaños sobre un total de 450. En segundo lugar quedó el «Bloque Timoshenko», con 129 escaños, mientras que el partido de Yuschenko, Nuestra Ucrania, obtuvo sólo 81 escaños. En agosto el presidente nombró como primer ministro, encabezando una coalición pro rusa, a su antiguo rival Yanukovych.